Dionís Bennàssar es un producto genuino de Pollensa…
Empezó a pintar casi furtivamente, con un pudor que ya revelaba esa desproporción que el verdadero artista constata diariamente entre lo realizable y lo soñado.
Trabajo día tras día, en alternativas de plenitud y desaliento, pero siempre con esa fuerza testaruda que empuja a los predestinados.
No busquéis en él al virtuoso que os dirá cualquier cosa de una manera florida. Su arte es algo más que retórica; es sensibilidad, palpitación, belleza, en el sentido más aristocrático de la palabra.
Tito Cittadini
Junio 1940